No es ningún secreto: a la mayoría de nosotras nos encantaría ser dueñas de unas pestañas densas, largas y rizadas. Un deseo que, reconozcámoslo, raramente se cumple; de ahí que echemos mano de todos los recursos que tenemos a nuestro alcance para conseguir un claro objetivo: dar protagonismo a la mirada.

Esta técnica, que suele durar entre 1 hora y hora y media, requiere una serie de pasos:

• En primer lugar, la especialista analiza el tamaño del ojo para elegir la extensión de longitud más adecuada.
• A continuación, aplica las extensiones de una en una sobre cada una de las pestañas, desde la mitad del borde palpebral hasta el vértice exterior.
• Para adherirlas y asegurar una permanencia prolongada, se aplica una silicona especial sobre cada pestaña natural.
• Después de 24 horas, las pestañas pueden ser maquilladas con una máscara que no sea resistente al agua. Para desmaquillarse hay que utilizar productos libres de aceite.